Flower Ordónez: Trabajo y Mística
Con casi dos décadas en el Izcaragua Country Club, alterna su pasión por el fútbol con una labor eficiente y dedicada
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A pesar de sus 68 años bien llevados, Flower Ordóñez puede ser catalogado como un trabajador abnegado e incansable.

Apasionado del fútbol desde muy niño, Ordóñez llegó a ser semiprofesional en su Colombia natal específicamente con el América de Cali.

Con esos sueños de abrirse paso en la vida, emigró a Venezuela con apenas 20 años y desde entonces lo que ha hecho es trabajar tras formar una familia en la que atesora cinco hijos.

Pero fue a principios de este siglo, concretamente en el año 2001, cuando tuvo su primer contacto con el club Izcaragua.

"Supe del club gracias a mi amigo Adelfo Requena. Yo venía de trabajar en la empresa Plumrose Latinoamericana y él me comento que necesitaban personal en el club Izcaragua. Prácticamente vine inmediatamente y comencé como trabajador eventual en el campo de golf y más o menos a los 18 días me dejaron como personal fijo. En el campo de golf trabajé 2 o 3 años y luego me pasaron al área de tenis la cual dure 10 años".

Comenta Ordóñez que en la vaguada del año 2012 el campo de fútbol fue una de las áreas afectadas del club, ya que el río se salió de su cauce y dañó toda la grama, quedando en muy mal estado.

"El señor Leonardo Meda, quien es socio del club y futbolista, se hizo cargo de la recuperación del campo, y habló para que me cambiara del tenis a esa área para que lo ayudara en el trabajo que quería realizar, ya que sabia de mi gusto por el futbol. Después de una ardua labor, como la siembra de grama y recuperación de la infraestructura -entre otras cosas-, el campo quedó adecuado para su uso", recordó.

Ordóñez tiene muy gratos recuerdos de los grandes torneos que se realizaban en el área de futbol, y de los equipos que visitaban al club Izcaragua, como el San Agustín, Club Sicilia, la Salle, Academia Militar de Venezuela, club Hípico, entre otros.

En la actualidad la vara está más alta, ya que utilizan las instalaciones del club los equipos profesionales Atlético Venezuela, Metropolitanos y UCV.

Recuerda con satisfacción que estando ya trabajando en el Izcaragua fue convidado a mostrar sus habilidades en el campo. "Entonces jugaba en el San Agustín, equipo que se enfrentó al Izcaragua. Allí conocí al señor Orlando Torres, exfutbolista que había jugado con el Deportivo Italia y quien era el entrenador del equipo del Izcaragua. Al darse cuenta que yo era futbolista me ingresó a su equipo. En ese momento tuve la dicha de jugar al lado de los señores. Giussepe Marra, Mauricio Potañolo, Roche todos socios muy queridos. También jugué con el exprofesional venezolano Luis Mendoza".

Flower Ordóñez no esconde su satisfacción de trabajar en un club como el Izcaragua, al que considera como su casa. "Me encanta el club porque estoy en mi elemento que es el futbol y me complace mucho mantener la cancha en buen estado, ver como hacen las prácticas los equipos, ya que me trae muchos recuerdos y realmente estoy muy complacido con mi área y además se siente bien que las personas me feliciten por la dedicación que le doy a mi trabajo.”