El pensamiento crítico nos debe conducir a la reflexión ¿Existe conflicto entre élite y colectivo?. ¿Uno desplaza al otro?. O se trata más bien de ¿visiones complementarias de las relaciones de poder?
¿Conflictos en el Estado Ciudadano?
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Por Carlota Salazar Calderón


 Digo esto, porque desde que el mundo es mundo, en todas las sociedades, desde las primitivas hasta las más desarrolladas, unos mandan y otros obedecen. Esa es una máxima.
Como sentencia Gaetano Mosca “…no podemos imaginar en realidad un mundo organizado de otra manera, en el que todos estuviesen sometidos a uno solo, aunque en pie de igualdad y sin ninguna jerarquía entre ellos, o que dirigiesen por igual los asuntos políticos…”. Ese, aunque, allí, es muy importante porque quiere decir que si bien es cierto existe la posición de dominio natural, debe ser en igualdad.
 
Siempre hay una razón para tener esa posición de dominio, nada es gratis, alguien paga la cuenta. Ese líder cuenta con unos recursos materiales, intelectuales … que le permite imponerse sobre los demás, para que además lo acepten. En efecto, el Libertador logró ascendencia sobre el resto de caudillos militares por sus cualidades intelectuales, sus relaciones internaciones… La Venezuela republicana después de 1830 gestó una clase militar oligárquica dominante a cuya cabeza estuvo el centauro de los llanos, José Antonio Páez, con más tierras y dominio que nadie.
Así como también, en la medida que la civilización progresa y logra reivindicaciones sociales, políticas y económicas las posiciones de poder y las razones para detentarlo cambian.
 
La lucha de la humanidad es la lucha por el poder político. Parafraseando a Lechner el cambio en las hamacas. Cada revolución encarnó un cambio, sin hacer juicio de valor si fueron buenos o malos. En la inglesa la burguesía en ascenso niveló el poder absoluto de la monarquía; la americana crea un régimen republicano presidencialista; la francesa marca el fin del absolutismo; la suramericana continúa el modelo republicano; la primera y segunda revolución industrial crearon una clase obrera reaccionaria y exigente de derechos; el socialismo con la tesis de la conspiración de los iguales, socialismo utópico… crearon el marxismo, leninismo, maoísmo, trotskismo; la Perestroik y el Glasnost liderado por Mijaíl Gorbachov produjo la caída del Muro de Berlín, en el imaginario colectivo derrumbó la división por razones políticas; la Segunda Guerra Mundial nos dejó un nuevo orden con la democracia liberal representativa.

Pero, la insatisfacción, que crece como una bola de nieve en Latinoamérica y en Venezuela, en el ejercicio de esa representación ha generado toda una discusión y corrientes que buscan acercar el poder a la sociedad, como es la propuesta de democracia deliberativa desarrollada por Jürgen Habermas; la democracia delegativa que sugiere restricciones a los poderes; la democracia participativa…
Esa es la lucha de estos tiempos y a ello responde el planteamiento del Estado Ciudadano. Entonces no se trata de eliminar o aniquilar las elites, se trata de coexistir entre la representación y la participación, entre un liderazgo moderno e inclusivo, que fortalezca a la sociedad para que ésta logre expresión institucional. Visto así no hay dicotomía entre las élites y el colectivo siendo más bien complementario y necesario en la búsqueda del todo.

@carlotasalazar
 
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