Activa tus cinco sentidos para reconocer esa esencia típica de esta temporada que aparece desde ya en cada rincón. Son muchas las experiencias sensoriales que acompañan la época decembrina, así que disfrútalas y encuentra el significado especial en cada una de ellas
La Navidad nos cautiva a través de los sentidos; las emociones se reencuentran, y los recuerdos florecen, es el momento de conmemorar tradiciones y también de crear nuevas, enfócate y dedícate a sentir de una manera navideña.
GUSTO
La mesa está servida
Sin restricciones ni culpas, en enero nos ocupamos de este asunto. Diciembre abre en todo su esplendor las puertas de la cocina, donde los sabores destacan haciendo valer la espera durante once meses. La cocina será la más concurrida sin duda, con el recetario de la abuela como invitado especial.
Prepara todo lo que te recuerde a tu niñez, seguramente ahora de adulto te deleitarás más. Hallacas, bollitos, pan de jamón, ensaladas si no tienes habilidades culinarias contrata a alguien. Revisa el horno, porque el pernil o el pavo quieren darte también el abrazo de Feliz Año. No te olvides de los postres; galletas decoradas, tortas, caramelos y más.
Involucra alguna preparación típica de otra región, puede sorprenderte y crear una nueva tradición.
OÍDO
Un mágico tintineo
Afina tus oídos y adorna con campanas y cascabeles; simbolizan la alegría de las fiestas y, según creencias, este tintinear tan particular aleja los malos espíritus y atrae la buena suerte.

Crea una lista de canciones para cada día. Gaitas, aguinaldos, villancicos, sube el volumen y recuerda que es sólo una vez al año.
Disfruta esos alborotos en casa. Ese bullicio significa que hay risas, conversaciones, unión, complicidad y reencuentros entre familiares y amigos.
Aunque su uso se ha hecho con más precaución en los últimos años, los fuegos artificiales anuncian la llegada de las festividades, representan tradición y la llegada de nuevos ciclos llenos de nuevas energías.
OLFATO
Huele a Navidad
Son aromas que te pueden trasladar a instantes, fragancias que reflejan la calidez de estas fechas; olores que se cuelan entre cada uno de los espacios de la casa. Algunos que hacen recordar la cotidianidad y costumbres, otros que emanan significado y aquellos que forman parte del ritual típico decembrino.

El olor a pino, canela, jengibre, vainilla, chocolate y esencias cítricas como la mandarina o naranja son relacionados directamente con esta temporada; son perfumes que crean ambiente, buscan atraer la prosperidad, bienestar, confort, buena salud y alegría; pueden ser esparcidos a través de velas decorativas, difusores, piezas y adornos.
TACTO
Texturas festivas
Hacer tus propias decoraciones, o por lo menos algunas de ellas puede ser un momento que atesores en tu memoria a lo largo del tiempo; con tal, de eso se trata la Navidad, de compartir y divertirse.

Busca texturas y exhíbelas en tus decoraciones; cojines, manteles, alfombras, cortinas, cobijas, edredones y hasta combina la pijama con pantuflas de peluche. Consigue la calidez y comodidad entre los materiales como el terciopelo, la pana, el algodón, la seda e involucra brillo… mucho brillo. Pasa a la elegancia con tu estreno para la Nochevieja con un vestido de tul, chifón o encaje.
VISTA
Más allá de lo que ves
Los colores tienen un gran significado al momento de la decoración, aunque todos los años se cumplen tendencias a nivel cromático. El rojo y el verde son un dúo que no puede faltar. Son colores que evocan el amor y la esperanza, todo lo que queremos atraer para el venidero año. Para este 2025, las tendencias son las combinaciones con tonalidades doradas en sus matices más brillantes y perlados, buscando la abundancia y prosperidad.
Las luces dan ese toque especial que no puede faltar, mientras más ¡mejor! y además tienen significado: la protección y el alejamiento de energías oscuras.

Desvía un poco la mirada, y planifica un entretenido encuentro entre amigos para ver un maratón de películas navideñas, creando un ambiente propicio para disfrutar con los cinco sentidos.