Él es el actual director general de Lidotel Venezuela, una de las cadenas de hoteles más importantes del país. Se destaca por ser espontáneo, conversador, viajero y de buen comer. Su niñez fue divertida, pues estuvo rodeado de sus hermanos, que juntos, eran bastante inquietos y no les faltó el cariño, el amor de hogar y el cuidado de sus padres, cualidades que ha tenido presente en su vida familiar: “Soy muy de casa, tratamos de formar a los niños con valores, principios y respeto y creo en la confianza. Tratamos de viajar y tener experiencias que refuercen el vínculo familiar”, comenta Oldrich.
Es ingeniero civil, administrador hotelero con especializaciones en aperturas y diseño de hoteles. Su experiencia suma más de 25 años en el sector y su llegada a Lidotel fue por recomendaciones de personas con quien había trabajado en el exterior y agrega: “Creo que cuando conocen tu trabajo es una buena referencia, lo demás es entrar y demostrar por qué te escogieron y después de ahí ya han pasado bastantes años”.
Oldrich tiene una amplia experiencia en Lidotel y la define de manera muy clara y transparente: “Te tratan como familia, a todo nivel. Creo que a pesar de ser la compañía tan grande que somos, el legado de la familia Cohen es arropar a su gente dando calidez y eso genera responsabilidades y compromisos”, menciona.
Este profesional tiene pasión y esmero por su trabajo y, sin duda, lo que más disfruta es: “La relación en todo sentido. Un hotel es literalmente un submundo, diferentes nacionalidades, mucho por atender, requerimientos internos, externos, no se pueden imaginar todas las solicitudes que se hacen en nuestro trabajo, no hay tiempo para aburrirse”.
Entre sus hobbies tiene los juegos de equipo como el pádel y el fútbol, también el cine y los viajes. Sus destinos preferidos son las playas y los paisajes naturales: “Los que te den tranquilidad y te saquen del día a día... En Venezuela hay muchos lugares mágicos, sus playas son resaltantes y el tema de tener un país con diferentes pisos térmicos es un gran impacto en los turistas. Creo que lo importante es conocer lugares y sus costumbres, para que haya recuerdos memorables”.
Entre los viajes que quisiera hacer próximamente están destinos como la Gran Sabana, Machu Picchu, Iguazú o Caño Cristales. Sueña con reunirse en familia y con amigos que hace tiempo no ve y, aunque el futuro no lo ha pensado, dice: “Me gustaría viajar mucho, pero también creo que me hace falta aportar a la comunidad en algún sentido, de acuerdo a mis conocimientos”, concluye Oldrich.