Look
Nupcial
POR ADRIANA BELLO G. @LaEditoraGlam
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Pre-boda: boho de lujo
Este estilo es una fusión perfecta entre lo relajado y lo sofisticado. Va muy bien en cenas íntimas casual-chic, fiestas de playa o en sesiones de fotos. Aquí te dejamos algunas recomendaciones:
1. Tejidos nobles y naturales: opta por tejidos con caída y textura, como lino, seda, algodón orgánico, gasa o encaje delicado. Evita telas sintéticas que no respiran.
2. Silueta relajada, pero con estructura: piezas con mangas acampanadas bien confeccionadas, escotes tipo halter que enmarquen los hombros o prendas con cortes asimétricos que resalten la figura. Nada demasiado ceñido, ni demasiado suelto.
3. La paleta de colores: incluye tonos tierra, marfil, arena, blush, dorado pálido y verde oliva. También, toques metálicos suaves o detalles en tonos joya (como ámbar, jade o coral) en accesorios o bordados. Evita los colores neón o los estampados recargados.
4. Accesorios: utiliza joyería con piedras naturales, piezas artesanales o vintage, pero que sean refinadas.
5. Estilismo natural, pero pulido: busca un maquillaje glowy, con piel luminosa, labios nude y sombras de ojos cálidas. El peinado puede ser una melena suelta con ondas suaves, una trenza relajada o un recogido bajo con mechones sueltos. Desenfadado, pero impecablemente trabajado.
6. Calzado: las sandalias de cuero fino y las alpargatas en tonos neutros son perfectas. Evita las plataformas exageradas o los tacones de charol que desentonan con el espíritu natural del estilo.
Errores que debes evitar:
- Disfrazarte: ya que la idea es ser una versión elevada y elegante del estilo bohemio.
- Exceso de estampados: uno o dos elementos clave bastan.
- Demasiados estilos: mantener coherencia entre el outfit, los accesorios y el entorno es esencial.
Este look combina naturalidad con calidad, espontaneidad con intención y romanticismo con sofisticación.
Post-boda: cerrar con estilo
Ya sea una cena íntima, brunch o fiesta con amigos y familia cercana, el look post boda es la oportunidad perfecta para brillar con un atuendo refinado, moderno y hasta con un toque divertido, sin caer en lo informal. Aquí te compartimos algunas claves para lograrlo:
1. Que refleje tu personalidad: el outfit post boda es tu momento para divertirte con la moda. Puedes arriesgarte un poco más, jugar con texturas, cortes modernos o un estilo más sensual.
2. Apuesta por un blanco renovado o tonos suaves: aunque ya pasó el gran momento del vestido de novia, el blanco sigue siendo protagonista. Se vale jugar con sus variantes: marfil, crema, perla, champagne o tonos empolvados (como el rosa palo, el azul hielo o el nude).
3. Siluetas elegantes pero cómodas: elige prendas que te permitan comodidad sin perder el glamour, como vestidos midi o cortos con estructura, conjuntos de dos piezas o pantalones con tops joya.
4. Tejidos de calidad y detalles especiales: la diferencia entre un look común y uno lujoso está en los materiales.
5. Zapatos que hablen por sí solos: es tu oportunidad para usar un calzado llamativo, pero eso sí, asegúrate de que sean cómodos.
6. Accesorios con brillo sutil: menos bridal, más glam. Opta por piezas contemporáneas y no temas destacar con un detalle sofisticado.
7. Estilismo: la clave es parecer fresca y descansada, aunque no lo estés.
Errores que debes evitar:
- Usar algo demasiado informal o cotidiano.
- Repetir el estilo del vestido de novia (es momento de mostrar otra faceta).
- Elegir algo incómodo, que no te deje disfrutar.
- Lucir desaliñada por “estar cansada”
Este estilo es una fusión perfecta entre lo relajado y lo sofisticado. Va muy bien en cenas íntimas casual-chic, fiestas de playa o en sesiones de fotos. Aquí te dejamos algunas recomendaciones:
1. Tejidos nobles y naturales: opta por tejidos con caída y textura, como lino, seda, algodón orgánico, gasa o encaje delicado. Evita telas sintéticas que no respiran.
2. Silueta relajada, pero con estructura: piezas con mangas acampanadas bien confeccionadas, escotes tipo halter que enmarquen los hombros o prendas con cortes asimétricos que resalten la figura. Nada demasiado ceñido, ni demasiado suelto.
3. La paleta de colores: incluye tonos tierra, marfil, arena, blush, dorado pálido y verde oliva. También, toques metálicos suaves o detalles en tonos joya (como ámbar, jade o coral) en accesorios o bordados. Evita los colores neón o los estampados recargados.
4. Accesorios: utiliza joyería con piedras naturales, piezas artesanales o vintage, pero que sean refinadas.
5. Estilismo natural, pero pulido: busca un maquillaje glowy, con piel luminosa, labios nude y sombras de ojos cálidas. El peinado puede ser una melena suelta con ondas suaves, una trenza relajada o un recogido bajo con mechones sueltos. Desenfadado, pero impecablemente trabajado.
6. Calzado: las sandalias de cuero fino y las alpargatas en tonos neutros son perfectas. Evita las plataformas exageradas o los tacones de charol que desentonan con el espíritu natural del estilo.
Errores que debes evitar:
- Disfrazarte: ya que la idea es ser una versión elevada y elegante del estilo bohemio.
- Exceso de estampados: uno o dos elementos clave bastan.
- Demasiados estilos: mantener coherencia entre el outfit, los accesorios y el entorno es esencial.
Este look combina naturalidad con calidad, espontaneidad con intención y romanticismo con sofisticación.
Post-boda: cerrar con estilo
Ya sea una cena íntima, brunch o fiesta con amigos y familia cercana, el look post boda es la oportunidad perfecta para brillar con un atuendo refinado, moderno y hasta con un toque divertido, sin caer en lo informal. Aquí te compartimos algunas claves para lograrlo:
1. Que refleje tu personalidad: el outfit post boda es tu momento para divertirte con la moda. Puedes arriesgarte un poco más, jugar con texturas, cortes modernos o un estilo más sensual.
2. Apuesta por un blanco renovado o tonos suaves: aunque ya pasó el gran momento del vestido de novia, el blanco sigue siendo protagonista. Se vale jugar con sus variantes: marfil, crema, perla, champagne o tonos empolvados (como el rosa palo, el azul hielo o el nude).
3. Siluetas elegantes pero cómodas: elige prendas que te permitan comodidad sin perder el glamour, como vestidos midi o cortos con estructura, conjuntos de dos piezas o pantalones con tops joya.
4. Tejidos de calidad y detalles especiales: la diferencia entre un look común y uno lujoso está en los materiales.
5. Zapatos que hablen por sí solos: es tu oportunidad para usar un calzado llamativo, pero eso sí, asegúrate de que sean cómodos.
6. Accesorios con brillo sutil: menos bridal, más glam. Opta por piezas contemporáneas y no temas destacar con un detalle sofisticado.
7. Estilismo: la clave es parecer fresca y descansada, aunque no lo estés.
Errores que debes evitar:
- Usar algo demasiado informal o cotidiano.
- Repetir el estilo del vestido de novia (es momento de mostrar otra faceta).
- Elegir algo incómodo, que no te deje disfrutar.
- Lucir desaliñada por “estar cansada”
