CARA A CARA
Por Oriana Abello
Master KG
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Quizá su nombre no te suena muy familiar, pero seguro que su canción Jerusalema (junto a la cantante Nomcebo Zikode), sí. Lo curioso es que esta melodía es de finales de 2019, pero fue cuando surgió el #JerusalemaDanceChallenge, el baile que ha recorrido el planeta frente a los estragos de la pandemia desde las redes sociales, que se convirtió en todo un éxito internacional.

Master KG, cuyo nombre real es Kgaogelo Moagi, es un Dj de Sudáfrica que empezó a crear ritmos desde los 13 años con una computadora que le regaló su tío. 

Jerusalema ha sido reproducida más de 60 millones de veces en Spotify, la plataforma de streaming más popular hasta el momento y, además, tiene una historia con un especial significado.

Considerada de género góspel, es interpretada en la lengua sudafricana zulú y su letra habla de Jerusalén como el verdadero hogar, por lo que el compositor pide ser llevado allí, el lugar ideal para estar en comunión con Dios.

Nomcebo confiesa que cuando Master KG la invitó a participar estaba atravesando por un período de crisis de fe, ya que estaba cansada de ser siempre corista y no la voz protagonista.

Además de su pegajosa melodía, la canción vino acompañada por un baile optimista y alegre (y relativamente fácil de memorizar) que se patentaría desde Tik Tok, cuando distintos trabajadores de hospitales europeos (en particular de Italia y Francia) se grabasen desde sus áreas de emergencia. A ellos se les sumaron monjas y clérigos de distintas órdenes religiosas. Esto sin mencionar las veces que la canción ha sido usada en videos de Youtube e Instagram.

Se cree que el #JerusalemaDanceChallenge surgió luego que un grupo de amigos bailarines en Angola se grabaran haciendo una coreografía del tema en su hora de almuerzo. 

De hecho, tal ha sido el impacto cultural de esta composición, que incluso el magnate e influencer italiano Gianluca Vacchi y la modelo venezolana Sharon Fonseca nombraron a su primogénita Blu Jerusalema.

Definitivamente, un tema muy espiritual que nos hace bailar con esperanza en estos tiempos de pandemia e incertidumbre.