1. Rompió un récord al nacer
El 21 de junio de 1982 se convirtió en el primer futuro rey que nació en una clínica. Anteriormente, las mujeres de la familia real daban a luz en casa, pero Diana se negó a hacerlo (pensando en posibles complicaciones) y lo tuvo en el St. Mary’s Hospital de Londres.

2. Una cicatriz a lo Harry Potter
Si se fijan arriba de su ojo izquierdo, verán que tiene una cicatriz que él mismo bromea diciendo que es como la de Harry Potter porque, dependiendo del día, se nota más o menos. Se la hizo accidentalmente un amigo del colegio mientras jugaban golf.

3. Su amor platónico
Cuando era un adolescente, la supermodelo Cindy Crawford era su crush. Afortunadamente para él, su madre era la princesa Diana, quien usó toda su influencia y encanto para planificar un almuerzo sorpresa en Kensington Palace para que él la conociera. ¡Estaba nervioso pero feliz!

4. Defensor del medio ambiente
Heredó de su padre el amor por la naturaleza y es tan defensor del planeta que, en el 2020, creó el Earthshot Prize, una ceremonia donde premia a las mejores iniciativas ambientales para enfrentar y solucionar los desafíos naturales de hoy.

5. No se iba a llamar William
El entonces príncipe Carlos y la princesa Diana tuvieron que ponerse de acuerdo para el nombre de su primogénito. Ella prefería Oliver o Sebastián; mientras que Carlos quería que se llamara Alberto. Su nombre completo es William Arthur Philip Louis.

6. Fan de series y películas
Por algo tiene casi 14 años siendo el presidente de la Academia del Cine y la Televisión Británica (BAFTA por sus siglas en inglés)… En una entrevista a la radio de la BBC, dijo que entre sus series favoritas estaban Homeland y Game of Thrones.

7. Fue piloto de ambulancias aéreas
Después de su carrera militar, el príncipe William no renunció a volar. Durante dos años (del 2015 al 2017), trabajó para la organización benéfica London's Air Ambulance ayudando a médicos y paramédicos a salvar vidas. Hoy en día sigue colaborando con ellos, pero haciendo galas para recaudar fondos.

8. Surfista
El futuro rey británico es un amante de los deportes y su atlético cuerpo es la mayor evidencia. Pero además de la natación, el fútbol y el polo (este último ha sido todo un reto para él por ser zurdo), le encanta surfear.

9. No usa anillo de matrimonio
Desde que se comprometió dejó muy en claro que no le gustaban las joyas; de hecho, lo único que lo vemos usar son relojes (particularmente uno que le regaló su madre)… ¡Esperemos que en unos años sí le guste la corona al menos!

10. Adicto a los dulces
Aunque cuida su alimentación y procura hacer bastante ejercicio, no puede resistirse a una chocolate biscuit cake. Asimismo, confiesa que no es muy fan de las especias y los sabores picantes.