Filomena Fernández
La moda es un mundo en el que cada uno de nosotros tiene un espacio. No todos somos iguales, ni tenemos los mismos gustos; pero es aquí donde la diversidad y las opciones se unen para brindar comodidad y estilo.
Filomena nació y creció entre las playas venezolanas. Sus primeros años de vida fueron en la ciudad de Puerto la Cruz, en el estado Anzoátegui. Vivió entre telas e hilos, ya que tanto su abuela como su mamá fueron modistas. Esta realidad fue la puerta a un mundo lleno de sueños en el que la moda era el gran pilar. Los ejemplos de constancia, determinación y creatividad fueron fundamentales para desarrollar en ella esa sensibilidad por lo que una pieza de ropa puede transmitir y, al mismo tiempo, el sentimiento que genera en quien la luce.
Con el tiempo, decidió llevar este gusto hacia una profesión. Estudió diseño de modas en la Academia de Diseño de Caracas y obtuvo su título en 1989. También comenzó a estudiar arquitectura en la Universidad Central de Venezuela, pero no logró terminar; sin embargo, se llevó de esa casa de estudios una gran influencia por las líneas, las formas y el diseño, visto desde otra perspectiva, elementos que la ayudaron a entender mucho más su estilo y lo que quería para la mujer que usara sus prendas.

Una mujer entre dos culturas
El arraigo por los colores, la diversión, el movimiento y las siluetas vienen siempre de la mano con ese sabor latino que nos representa. Pero en el caso de Filomena, otra cultura se apoderó de su visión como diseñadora, llevándola a crear líneas y conceptos muy particulares.
Luego de graduarse, se enrumbó a un nuevo destino: Japón. Una cultura totalmente distinta, con mujeres de características y gustos diferentes, pero con algo en común: el deseo de expresar su estilo. Fueron varios los años que Filomena trabajó para una gran casa de modas en ese lado del mundo, experiencia que la llevó a entender a las personas de una manera distinta, a conocerse mucho más a sí misma y, sobre todo, a reconocer al tipo de mujer que ella quería vestir.
Sin duda, era una nueva estética, pero con el mismo glamour y la misma feminidad. De esta aventura ella aprendió que el dicho de que “menos es más” es respetuoso, sofisticado e interesante, así que decidió que su sello combinaría la diversión de los colores con la sobriedad de los cortes limpios, encontrando el punto medio perfecto en el que ambas culturas tenían algo en común.
Hoy Filomena Fernández se basa en tres elementos que siente, desde su experiencia, identifican tanto a las latinas como a las asiáticas: la pasión, la elegancia y la feminidad; asegurando que nunca se le ha hecho difícil trabajar bajo esos principios, pues aprendió a reflejar esta experiencia en una propuesta única y en una marca que lleva su nombre y que decidió llevar a cabo en el 2011.

Lo que sus ojos observan se vuelve diseño
La fuente de inspiración es algo fundamental para cualquier artista. Algunos deciden refugiarse en sí mismos para crear, otros se inspiran en alguna persona de su vida y hay quienes disfrutan de lo que los rodea para hacerse de ideas que siempre estén en movimiento. Filomena ha confesado ser una amante de la naturaleza, particularidad que asocia con el haber crecido muy cerca del mar y en una ciudad del interior de Venezuela, en la que la urbanidad no es la característica principal.
Para ella, cada detalle de lo que la rodea es algo que vale la pena ser reflejado en una prenda, pues en un mundo con tanta diversidad, cada rincón, color, estación y cambio vale la pena ser motor de su proceso creativo.
Viajar es una de sus más grandes pasiones y cada lugar nuevo que descubre se queda en su memoria para ser trabajado por su capacidad de diseñar y, así, llevar a cabo piezas con mucho carácter, atemporalidad, sofisticación y originalidad.
Sin importar la edad, Filomena Fernández es una diseñadora que se caracteriza por brindar a cada una de las mujeres que acuden a ella piezas que las hagan sentir “
cool pero elegantes”.
Las historias bien contadas perduran
Filomena no intenta crear prendas que estén una temporada en el armario y ya. Ella prefiere irse por el camino de la durabilidad y, para eso, se necesita tener muy claro la mujer que ella es y a la que quiere vestir, esa que sabe muy bien lo que quiere y a dónde va.
Éste es el verdadero motor de sus colecciones llenas de piezas clásicas y de calidad, sin dejar de lado la diversión y la coquetería que quiere que las acompañen por siempre. Un diseño de esta venezolana pretende siempre estar en el armario, confiando en que las ocasiones no faltarán. Estos son los sentimientos que no se pueden encontrar en el
fast fashion y que la hacen confiar en sí misma como marca.

Nueva temporada, nuevas creaciones
Todos hemos cambiado en el último año… nuestra forma de ver lo que nos rodea y el valor que le damos a lo que tenemos y a quienes nos rodean tienen una nueva perspectiva.
Filomena hoy decide inspirarse en esta realidad para su nueva colección Otoño-Invierno 2021-2022.
Cortes más cubiertos en telas fluidas que combinan fibras naturales y sintéticas se unen a colores característicos de esta época del año, dando vida a una colección muy sobria y vibrante.
Verde, fucsia, ocre, amarillo, mostaza y morado son algunos de los colores que se pasearán en una nueva presentación inspirada en el reencuentro, en los viajes que quedaron pausados, en los seres queridos que no pudimos ir a ver, en las palabras que debimos dejar en cartas porque no llegamos a decirlas y, en especial, a los recuerdos que se atesoraron más que nunca… todo enmarcado en un estampado inspirado en las estampillas de correo.
Una alianza con una nueva propuesta
Filomena Fernández ha iniciado un proyecto junto a su hija. Se trata de una línea llamada #FiloByKya, la cual quiere dar un toque de casualidad y frescura a toda la marca. Este nuevo capítulo tiene mucha de su atención, así que el proyecto promete tener nuevos diseños y mostrar una nueva cara de su marca.
Coordenadas:
Instagram: @filomenafashion
Página web: www.filomenafernandez.com
Dirección: 4217 Ponce de León, Coral Gables, FL 33146