En la medida que se incrementa el número de personas contagiadas por el Covid-19 con la aparición de nuevas variantes o cepas en Brasil, Gran Bretaña, Filipinas y la India, crece también la necesidad de la población de contar con una oportuna y rápida vacunación. Un reclamo que se hace más urgente en los países latinoamericanos que han visto superados y desbordados sus sistemas de prevención y atención sanitaria. Con el comienzo de la pandemia a partir de enero del 2020 en Wuhan, China, y su rápida expansión por Europa y Estados Unidos pasaron varios meses de preocupación y expectativa por encontrar la vacuna capaz de enfrentar una pandemia con capacidad de contagio superior a las conocidas en el pasado y además con una impune contaminación global a despecho de poblaciones y territorios.

El 13 de marzo del 2020, se declaro Estado de Emergencia en Venezuela, habiéndose registrado el primer caso de contagio en la zona de Antimano, Caracas. Entonces se declaro la “Cuarentena Nacional” y posteriormente, la adopción por semanas entre radical y flexible, lo que permitió de alguna manera mantener números preocupantes pero, moderados con relación al resto de los registrados en los países vecinos (Colombia y Brasil). Sin embargo, en el último mes, las cifras revelan un significativo aumento de contagios y fallecidos, y el desbordamiento de centros hospitalarios y clínicas privadas. También el hecho de que no se tenga certeza sobre un plan de vacunación a escala nacional y por los sectores más susceptibles de contraer el virus ha generado un cuadro paralelo de preocupación colectiva. A ello también ha contribuido el estallido de la llamada “Cepa Brasilera” que ha disparado drásticamente los casos en Brasil y también en países como Chile que habría logrado bajar el volumen de casos y una vacunación de 5 millones de personas y Uruguay que se mantenía niveles discretos.

 
MUERTES Y VACUNAS

Las cifras más recientes de la pandemia y su efecto en el país conocidas al jueves 25, reflejan lo siguiente:

Habiéndose registrado las mayorías de los casos en el Área Metropolitana y en los estados: Miranda y Carabobo, sustituyendo el rebrote anterior en el Zulia y los estados fronterizos. Sin embargo, el país aparece junto con Paraguay en cero en materia de vacunación. Hasta ahora han llegado al país, según informe oficial, 700.000 vacunas, las cuales se distribuyen:

Las dosis que han sido aplicadas la primera al personal médico y de enfermería, y la segunda al sector educativo, pero sin que exista todavía suficiente información sobre el método utilizado para su implementación, lo cual contribuye agravar la preocupación colectiva sobre la materia.

 
CASO ASTRAZENECA

También se anuncio la importación de la ya conocida vacuna Astra-Zeneca de Cambridge, Gran Bretaña que ya es conocida y aplicada en buena parte de Europa y que ha despertado incluso polémicas que condujeron a su prohibición en naciones como Suecia, entre otras como una medida que posteriormente fue revocada y autorizada su aplicación de acuerdo a las certificaciones científicas internacionales. Un lote de medicamentos llegaría al país como producto de un acuerdo con El Fondo de Acceso Global para Vacunas Covid-19 (COVAX) organismo vinculado a la Organización Panamericana de la Salud (OPS) al cual el país adeuda 11 millones de dólares que habrían de ser cancelados con recursos financieros nacionales bloqueados en bancos extranjeros mediante gestión del Presidente Alterno Juan Guiado, quien tienen el reconocimiento de los principales países que integran el organismo. Ello provoco un “impasse” político dado que Miraflores cuestiono el mecanismo aplicado y de paso se sumo a las naciones que con anterioridad habían rechazado a la vacuna inglesa.

 
PLAN EMPRESARIAL

Si bien, el gobierno ha anunciado que espera nuevas vacunas rusas, chinas y las dosis de las vacunas cubanas (Soberana 02 y Abdala) en plan de experimentación, el hecho cierto es que no existe seguridad sobre la materia justamente cuando es mayor el requerimiento de una respuesta a la llamada “Tercera Ola” del Covid-19. En este sentido, el Presidente de Fedecamaras Ricardo Cusano anuncio un programa especial promovido por sectores empresariales a través de la empresa Meditron que asegura la entrega cada 15 días de 750.000 dosis hasta completar 6 millones, además, de material para laboratorios neveras, cadenas de fríos, etc.

 
Falta conocer la respuesta oficial en este sentido pero es evidente que la escasez de vacuna se ha convertido en materia de angustia y cada vez mayor preocupación para los ciudadanos. Y es común hoy en las calles la expresión “Y cuando me vacunan”.