El 13 de febrero de 1959 Rómulo Betancourt jura como Presidente de la República después de su victoria como candidato de Acción Democrática en las elecciones de 7 de diciembre de 1958, frente a los aspirantes Wolfgang Larrazábal de URD y PCV, y Rafael Caldera de Copei. Terminaba la transición de un año a la caída de Marcos Pérez Jiménez el 23 de enero de ese año conducida por Larrazábal y Edgar Sanabria. Se trataba de enfrentar los remanentes del militarismo tradicional, la revancha perezjimenista, reinstitucionalizar al Estado y avanzar en políticas sociales.

GOLPISMO Y ATENTADO
En los primeros años, Betancourt debió enfrentar la intentona golpista de derecha de Barcelona y los brotes izquierdistas apuntalados en la marina de Carupano y Puerto Cabello y antes, la invasión del General Jesús María Castro León desde Colombia y el atentado que milagrosamente le salvo la vida el 24 de junio de 1960 organizado desde República Dominicana por el dictador “Chapita” Trujillo. Luego vendría la llamada lucha “Cívico Militar” de los partidos PSV, MIR y el sector de URD encabezado por Fabricio Ojeda con acciones de terrorismo urbano combinadas con la organización de las guerrillas rurales inspiradas y ayudadas desde la Cuba fidelista.

DIVISIONES
El partido de gobierno habría de sufrir también dos graves divisiones que afectaron el apoyo a Betancourt. En primer lugar, en 1961 el desprendimiento del Movimiento de Izquierda Revolucionario (MIR) con apoyo de la fuerza juvenil y sectores obreros y posteriormente en 1962 la división del grupo ARS conocido como “AD-Oposición” que reunió, además, importantes activos dirigentes del partido de la lucha clandestina. Incluso, durante esos años se perfilo una tendencia disidente que con los años se convertiría en el Movimiento Electoral del Pueblo (MEP) encabezado por el dirigente fundador del partido Luis Beltrán Prieto Figueroa.

ECONOMÍA E INVERSIÓN
Al comienzo del gobierno, y dada la herencia económica de la dictadura de Pérez Jiménez, atenuada por el llamado “Plan de Emergencia” de Larrazábal, el gobierno se vio obligado a la aplicación de un programa económico severo que significo incluso, una rebaja del 10 por ciento a los sueldos de los empleados públicos, con las consecuencias que ellos suponían en el marco de una fuerte agitación política. No obstante, estos factores, se impulsaron en obras fundamentales de infraestructuras, como el desarrollo de las industrias básicas de Guayana y en el estimulo creciente en educación y en salud.

RR
Recientemente, el cineasta Carlos Oteyza escribió el guion y dirigió el documental “Rómulo Resiste” para Siboney Films que con testimonios con testigos de la época, analistas e historiadores ofrecen un interesante panorama de lo que significo el gobierno de Rómulo Betancourt, no solo para superar un contexto de grave conflictividad sino también para diseñar el rumbo de la llamada “Etapa Democrática Venezolana”.