Ucrania no deja de ser noticia. Minuto a minuto la tensión entre occidente y Rusia se vuelve más intensa debido a los anuncios que se multiplican de parte y parte que conllevan a serias amenazas.
Ucrania-Rusia: Tensión Mundial
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Por Trina Acevedo


Vamos a entrar en contexto, ¿cuál fue el punto de inflexión que provocó la crisis actual? Rusia desplegó más de 100 mil soldados de sus tropas a su frontera con Ucrania. Esto llamó la atención y alertó por completo a la comunidad internacional y los ojos volvieron a estar sobre Rusia. Esta situación hace temer una guerra debido a que este sería el peor conflicto desde la Guerra Fría entre occidente y Rusia.

¿Por qué? Rusia acercó sus tropas bajo el argumento de sentirse amenazada. Sin embargo, Occidente considera que esto se trata de una excusa para respaldar una posible invasión en territorio ucraniano. Declaraciones que Rusia ha negado.
Aunque, Rusia sí alzó la voz contra la posible integración de Ucrania a Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Moscú exige que Kiev nunca forme parte de esta alianza trasatlántica y que esta no tenga actividad militar en Europa del Este.

Estados Unidos y Rusia se sentaron a negociar en medio de esta tensión, pero parece que esta no es una opción. Los 30 integrantes de la OTAN rechazan esta insistencia y defienden su política de “puertas abiertas”. Incluso Suecia y Finlandia, que no forman parte de la OTAN, también rechazaron esta exigencia de Rusia. El primer ministro de Finlandia sentenció “no abandonaremos nuestro margen de maniobra”. El interés de Rusia se debe a que la capital ucraniana representa la base la Unión Soviética que se consolidó en 1922 y se desintegró en 1991.

Tensión por todos los frentes

Rusia no solo acercó sus tropas a la frontera con Ucrania. También realizó ejercicios militares con Bielorrusia, fiel aliada de Moscú, y realizó maniobras navales con Irán y China, lo cuales son fuertes rivales de Estados Unidos.

La OTAN reforzó su presencia militar en Europa del Este y Rusia llevó a cabo movimientos militares en el mar Báltico. Anteriormente, Rusia entregó más de 500 mil pasaportes en áreas controladas por los rebeldes. Esto justificaría cualquier acción bajo el argumento de defender a sus ciudadanos.

Se estima que este conflicto no acabaría en una guerra convencional sino que podría desarrollarse como una guerra híbrida. No solo se llevarían a cabo incursiones militares, también ataques cibernéticos y bombardeos de desinformación.

Temor real

El hecho es que hay un temor real: Dinamarca y Suecia trasladaron cientos de soldados y reforzaron su seguridad. Finlandia y Suecia ahora se preguntan si debería unirse o no a la OTAN.

Europa quiere ser el centro de negociación. Europa se desmarcó de Estados Unidos debido a que las primeras conversaciones entre Occidente y Rusia fueron entre Washington y Moscú. Europa consideró que la reunión debió efectuarse a nombre de la OTAN y no de manera bilateral. Francia, Alemania y España insisten en el diálogo y Estados Unidos no ha mencionado sobre un posible enfrentamiento con Moscú, pero ha dicho que se manejan todas las opciones.

Esta semana el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, advirtió que cualquier incursión en Ucrania desencadenaría una respuesta rápida, severa y unida por parte de Estados Unidos y sus aliados. Ahora nos preguntamos: ¿es posible que Rusia abandone sus intenciones sin haber obtenido nada a cambio o es que Moscú busca desestabilizar el gran poder continental que representa el bloque europeo? ¿Estados Unidos está sediento de una victoria luego de una salida tan atropellada en Afganistán?

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