El jugador Paraguayo Damián Bobadilla en medio de un forcejeo gritó "Venezolano muerto de hambre" a Miguel Navarro. El juego se detuvo para consolar al jugador venezolano; el muchacho no contuvo las lágrimas. Ambos equipos lo apañaron mientras se le pasaba la tristeza.

Hace poco ocurrió lo mismo en Chile con la jugadora venezolana Jhoagny Contreras.

Ya calmado, y al terminar el juego, Navarro declaró: "Nunca me avergonzaré de mis raíces. No hay lugar para el odio en el fútbol"."Quisiera yo tener en mis manos la solución al hambre que vive mi país, espero Dios me dé abundancia para poder ayudar. No creo que se pueda hacer mucho contra la pobreza mental".

El equipo Talleres de Argentina para el que juega nuestro patriota, elevó un comunicado denunciando la xenofobia y discriminación ocurrida.

El jugador paraguayo dijo que no quiso discriminar a nadie y ofreció disculpas. “Fue una reacción inapropiada en medio de la tensión del juego”, dijo.

Nosotros por acá consignamos la nota, no es para venganza, todas estas desgracias nos harán más grandes y más humanos.
!Que ira!
Nos vemos por ahí