Las refinerías venezolanas están inmersas en un proceso de modernización que busca integrar nuevas tecnologías para optimizar la producción y recuperación petrolera. Gerdul Gutiérrez, vocero de la Central Bolivariana de Trabajadores, destacó el papel estratégico del Centro de Refinación Paraguaná (CRP), considerado el pulmón energético del país.

El directivo subrayó que, pese a las limitaciones en insumos y equipos, el sistema se mantiene operativo gracias al “esfuerzo hormiga” de los trabajadores. Este modelo de resiliencia ha permitido sostener la productividad en regiones clave como la Faja Petrolífera del Orinoco, Morichal, Monagas, Occidente y Trujillo.

La recuperación del CRP y otras instalaciones se apoya en la actualización de equipos y la incorporación de tecnología adaptada al contexto venezolano. Gutiérrez enfatizó que el desarrollo es tangible y que la coordinación interna ha sido clave para superar obstáculos logísticos y técnicos.

En entrevista con Unión Radio, Gutiérrez reafirmó que el compromiso laboral ha sido determinante para mantener la operatividad nacional. En un entorno de restricciones, el avance tecnológico en el sector petrolero se convierte en símbolo de resistencia productiva y apuesta por la autosuficiencia energética.