Procurar la sostenibilidad hotelera es un deber de todos los que conforman este sector.
En búsqueda de la sostenibilidad hotelera
      A-    A    A+





La sostenibilidad del planeta tierra depende de cuán sostenibles sean las actividades humanas que en él se desarrollan. El hombre ha venido aprovechando los recursos naturales de su entorno, sin preocuparse de su conservación para el disfrute de futuras generaciones.

Ha ocasionado profundos impactos negativos en el ambiente, en especial en suelos, aguas y clima. Es una situación que amenaza y compromete el futuro de la vida humana en el globo terrestre.

En esta ocasión, con motivo de la invitación que me ha hecho la Dirección Ejecutiva de la Asociación Venezolana de Hoteles de Cinco Estrellas (AVECINTEL), voy a adentrarme en el tema de la sostenibilidad referido a la actividad hotelera, la cual, aunque asimilada a la que corresponde a empresas y destinos turísticos, tiene ciertas particularidades que interesa comentar.

Los hoteles, en especial los grandes, constituyen importantes núcleos receptores que dan vida turística a sitios y ciudades. Son verdaderos motores de la microeconomía local y referencia obligada en lo social y cultural.

Su estructura organizativa es más compleja mientras más habitaciones y más servicios ofrezcan al público. Un hotel de ciudad y uno de playa, ambos con más de 100 habitaciones, requieren importantes departamentos de: recepción; mantenimiento; servicio de habitaciones; alimentación y bebidas; ventas; seguridad; personal; recreación y administración.

Detrás de cada departamento hay unidades de apoyo logístico, tecnológico y de capacitación. Mientras más presencia tiene la hotelería en un área geográfica, municipio, ciudad o país, más impacto tendrán los hoteles en el ambiente y las comunidades.

Así, en Cancún, México; Costa Brava, España; Copacabana, Brasil; Aruba, y muchas otras áreas turísticas, los establecimientos hoteleros tienen una altísima responsabilidad respecto a la calidad de las playas, aguas, paisaje, aire que se respira. También en relación a capacitación, empleo y generación de impuestos.

La sostenibilidad de los hoteles se plantea desde el momento de su proyecto. Incluye su diseño funcional y arquitectónico, las tecnologías de construcción, operativas y energéticas. Igualmente los equipos de iluminación, aire acondicionado, refrigeración y cocina. Todo lo cual coadyuvará a que sean ambiental y económicamente sostenibles.

En la medida que un hotel planifique un menor consumo eléctrico y utilice energías limpias (solar, eólica o geotérmica); o híbridas, usando conjuntamente fuerza eléctrica del servicio público o plantas eléctricas propulsadas por gas, reducirá el impacto ambiental de sus operaciones y disminuirá el costo de dicha energía.

La sostenibilidad ambiental también requiere que los hoteles eviten la contaminación del suelo y de las aguas. Por eso, aquellos que, por no estar conectados a una red pública de cloacas, requieren tener pozos sépticos, o su propia planta de tratamiento de aguas servidas, deberán ser extremadamente celosos con el buen funcionamiento de estos. Sobre todo si las aguas tratadas son vertidas a mares, lagunas, ríos o canales, recursos en los cuales encontramos delicados ecosistemas, fuentes de alimentos y agua para riego o consumo humano.

En cuanto a la basura que generan, los hoteles deben clasificarla para su adecuada disposición y eventual reciclaje. Si bien es cierto que en países como Venezuela el reciclaje no está desarrollado, también es cierto que los hoteles pueden contribuir a su ejecución primaria. Esto se logrará separando materiales de cartón, metales, vidrio y plástico, con miras a que las empresas especializadas interesadas puedan reciclarlos.

En los casos de hoteles de playa, montaña, selva, o de aquellos a orillas de ríos y lagos, la sostenibilidad ambiental también va a estar condicionada por la calidad de los recursos naturales subyacentes. En especial aquellos que conforman parte de la oferta turística del establecimiento, y cuyo mantenimiento directo o indirecto depende del establecimiento que lo usufructa.

La sostenibilidad económica va más allá de lo hasta ahora comentado. Un hotel que no genera ingresos suficientes para amortizar los créditos recibidos para su construcción o mejoras, pagar sus costos y gastos operativos, y abonar cierta utilidad a sus accionistas o dueños, no es sostenible. Por eso es tan importante una buena planificación financiera y una sana administración.

Ciertas medidas destinadas a disminuir el impacto ambiental también tienen como consecuencia una disminución de los costos operativos. Por ejemplo, una política de reducción del uso del papel de oficina en las áreas administrativas de un hotel, buscando que todo (o casi todo) se digitalice, ahorrará dinero a la empresa y contribuirá a disminuir el impacto ambiental global.



Por su parte, instalar paneles solares con el fin de generar energía para iluminación o producción de agua caliente en baños, permitirá importantes ahorros en la factura de electricidad, mientras se está contribuyendo a disminuir el consumo de combustibles fósiles.

La sostenibilidad sociocultural es quizá uno de los aspectos más complejos e interesantes. Como dije, los hoteles mueven las economías locales a través de diferentes interrelaciones. Estas son:

  • La adquisición de productos y servicios en su entorno.
  • La oferta de capacitación y empleo a miembros de las comunidades circunvecinas.
  • El respaldo a las manifestaciones culturales de los pueblos que los rodean.
  • En ciertas circunstancias, el apoyo a las necesidades sanitarias de dichas comunidades.

En muchas ocasiones, los establecimientos hoteleros pasan a ser el eje social de la comunidad, el lugar donde se celebran las exposiciones, fiestas, reuniones de trabajo o eventos académicos

Sin embargo, también es el sitio que lidera la organización y progreso de la comunidad a través de las buenas prácticas y su difusión. Del patrocinio deportivo, artesanal y productivo. De la continua vinculación con sus miembros, buscando que estos se beneficien directa o indirectamente de la actividad económica que allí se desarrolla. Este impacto tiene mayor importancia en las regiones rurales. Allí, por lo general, es donde se aprecian más las carencias económicas y sociales.

Es importante recordar que, dentro de los objetivos del desarrollo sostenible, están varios que pueden ser impulsados desde los hoteles. Me refiero a contribuir con la disminución de la pobreza. A trabajar por el combate del hambre, por la promoción de la salud y bienestar de los pueblos. Estos objetivos pueden ser alcanzados al ofrecer fuentes de trabajo y ocupación a los miembros de las comunidades subyacentes.

La sostenibilidad sociocultural está enmarcada dentro de los criterios de responsabilidad social corporativa que, en muchos países, ya forman parte de las normas legales que rigen la actividad industrial y comercial.

Como muchos expertos hoteleros afirman, sus habitaciones y demás servicios no se venden por su sostenibilidad, sino por la imagen de calidad material y de servicios con la que se publicitan el establecimiento y sus productos.

Sin embargo, hay muchos aspectos de la calidad que cada día dependen más de la sostenibilidad ambiental. Por ejemplo, la de los recursos naturales que sirven de motivación para ir a determinado hotel; la calidad del agua; la energía eléctrica confiable; el paisaje y el saneamiento del entorno.

De la sostenibilidad económica dependerá el crecimiento y muchos temas relacionados con la prestación del servicio (alimentación y bebidas, mantenimiento y capacitación de trabajadores, entre otros). Por último, de la sostenibilidad sociocultural pudiera depender el grado de compromiso de los trabajadores, terceros prestadores de servicios y proveedores, hacia el hotel.

Procurar la sostenibilidad hotelera es un deber de empresarios, gerentes y trabajadores. Es una responsabilidad para los entes oficiales que se encargan de otorgar los permisos de funcionamiento, clasificación y categorización de estos. La incorporación de nuevas tecnologías, la capacitación y concientización del personal, junto a la continua aplicación de las prácticas recomendadas, ayudarán significativamente a alcanzar el objetivo propuesto.


Fuentes imágenes:
Mundo y edificio verdes: Internethttps://www.un.org/sustainabledevelopment/es/news/communications-material/